La Trump Tower de Punta del Este ya tiene su primer propietario en condiciones de habitar uno de los 160 departamentos de este desarrollo de ‘ultra lujo’ en Uruguay que tiene 60% de dueños argentinos.
Fue la primera entrega, de una lista que sumará todos los días nuevos propietarios, comenzando por los del primer piso. El 80% de la torre ya está vendida y el metro cuadrado de los departamentos ronda los u$s 6000.
La entrega de este primer departamento es todo un hito para el desarrollo que ya lleva una década de anunciado con una inversión que supera los u$s 100 millones.
Tras duras disputas entre accionistas y desarrolladores, hace dos años un consorcio de propietarios tomó el control y se dispuso a terminar el proyecto, lo que ocurrirá en 2023, según el argentino Jorge Garber, que tomó ahora las riendas del proyecto.
Hay cuatro prototipos de departamentos diferentes en la exclusiva torre cilíndrica vidriada. Esquineros de 300 m2, y unidades de 200, 160 y las más pequeñas de 100 m2. El precio de las unidades arranca en alrededor de u$s 800.000.
El desarrollo incluye infraestructura única en la región, que va desde piscinas climatizadas y cines privados, hasta una cancha de tenis cubierta reglamentaria con control de clima inteligente, helipuerto y un salón de habanos.
El 60% de los inversores de la Trump Tower son argentinos y el resto se reparte entre uruguayos, brasileños, algunos europeos y estadounidenses.
El consorcio responsable proyecta que, una vez finalizada, Trump Tower generará más de 100 puestos de trabajo, inclusive durante baja temporada. Sucede que los servicios que brindará el complejo de más de 12 mil metros cuadrados de amenities, es único en la región y mano de obra intensiva.
El sello Trump es central en este proyecto, una insignia que le costará más de u$s 2 millones al desarrollo. El propio ex presidente de Estados Unidos se involucró en la idea original y sus hijos, Ivanka y Eric Trump, se encargaron de presentar el proyecto en Punta del Este hace una década.
Fuente: El Cronista